domingo, 14 de abril de 2013

Si un alumne ho demana

Bé, sembla ser que fa no res començà a Catalunya una espècie de campanya que demanava l'escola en castellà, ja se sap, per espanyolitzar els jovenets catalans. Fora l'educació en català, estem a Espanya, aquí o es parla espanyol o no es parla. Bé, no està malament la idea, em sembla que els polítics es prenen seriosament això d'agafar la política dels anys cinquanta i traslladar-la a l'actualitat. Si volien cridar l'atenció, ho han aconseguit, i per la porta gran. Enhorabona.

Bueno, seguramente más de uno se preguntará por qué he decidido "mancillar" este texto escrito en la gloriosa lengua de Cervantes con el sucio lenguaje catalán. La respuesta es simple: porque en la escuela me enseñaron a hablarlo. Y tan orgulloso que estoy; soy bilingüe de nacimiento y gracias a ello he adquirido mayor habilidad para aprender lenguas, y encima el saber ya dos idiomas me motiva a ello. En mi casa siempre nos ha gustado leer a todos, libros de todo tipo, desde mi más tierna infancia. Es por ello que, pese a considerarme un científico en potencia, mi amor platónico por las letras es inconmensurable.

Si alguien ha seguido la actualidad informativa, se habrá enterado de la última efeméride del Tribunal Superior de Justicia Catalán: si en Cataluña una familia pide la educación "bilingüe" para su hijo, se le dará. Desde luego no parece una mala medida, así se fomenta el aprendizaje de otras lenguas y demás. No obstante, parece ser que el TSJC no tiene muy claro el concepto de bilingüismo. No estamos hablando de repartir equitativamente asignaturas en castellano y asignaturas en catalán en el horario del niño, no: hablamos de suprimir el catalán de todas aquellas asignaturas que no sean ella misma y sustituirlo por el castellano.

Primero, una aclaración, que parece ser que estamos todos un poco espesos: estamos hablando de escuelas catalanas, en territorio catalán, cuya lengua principal es el catalán. Creo que tampoco es ninguna barbarie lo que he dicho, ¿no? Tenemos niños catalanes y territorio catalán, no creo que sea muy difícil relacionarlo directamente con una enseñanza acorde a estos adjetivos. Pues se ve que no. Debo ser un iluminado de esos, de los que ven cosas que a los demás les pasan inadvertidas.

Vale, bien, imaginemos por un momento que hay una escuela catalana en la que se aplica esta medida. A tomar por culo el catalán, todos en castellano. Dentro de diez años, más de un 80% de los chavales de esa escuela será incapaz de expresarse con fluidez en catalán. Bien, ahora imaginemos que en unos años, la misma medida se aplica a toda la enseñanza pública catalana. Estupendo, en aproximadamente 50 años nos habremos cargado un idioma. Bien, me parece bien. Correcto. Fíjate que con esto mismo de sustituir el catalán por el castellano en la enseñanza me vienen a la mente tres nombres de la historia de España: Felipe V, Miguel Primo de Rivera y Francisco Franco. No sé si os suenan, pero son muy conocidos por su simpatía y su gran obra con la educación y la política españolas. Gracias a ellos, España ahora es una de las principales potencias mundiales (nótese la ironía).

En cualquier caso, yo siempre he dicho que una enseñanza completamente en catalán te cierra muchas puertas, ya se sabe, los conocimientos que tengas en catalán sólo te servirán en Cataluña. Pero de ahí a quitarlo de las aulas, me parece un poco excesivo. Pero vamos, que a lo mejor son cosas mías. Estoy loco, lo reconozco, y eso de que la escuela deba fomentar la cultura es una gilipollez. La escuela es un ejército de ciudadanos, con jerarquía y todo. Si no piensas como el resto, te martirizarán hasta que aprendas la lección. Y parece ser que casi nos hemos librado de esos raritos que se hacen llamar "intelectuales" o "filósofos". Menos mal, un país de analfabetos retrógados no puede permitirse tener esa chusma deambulando por la calle.

En resumen, el TSJC intentará aplicar esta medida de, digamos, "anti exclusión social", pero en vez de hacer que el individuo se adapte a la sociedad en la que se encuentra, mejor desplazamos toda la sociedad hasta donde lo pida el inadaptado. Es raro, porque eso me suena a que va en contra de toda la idea de justicia y democracia que tenemos. Quizás será mejor que me vaya a dormir, a ver si por la mañana entiendo mejor las intenciones de la justicia catalana.


Un apunte: resido en Cataluña, y la enseñanza la recibo en catalán. A no ser que le pidamos al profesor que imparta la asignatura en castellano. Sí, así a lo loco, sin jueces ni nada, y todos conformes. Aunque España no se lo crea, en Cataluña el catalán comienza a ser una lengua marginal, a todos nos va mejor el castellano. No creo que debamos rematarlo, sería mejor fomentarlo, como parte de la cultura de España que es.